sábado, 30 de julio de 2011

Patriotas














CAPITULO FINAL




A Hunter Headen lo trasladaron finalmente hacia el interior de la base, Old Snake y yo nos manteníamos ocultos.

-Hace un tiempo…- comencé a explicarle a Snake.- se me encargó ir a una secreto complejo militar ubicado cerca de las montañas para traer de regreso a un doctor llamado Maximillian Grant… fui con un grupo de rescate, entre ellos se encontraba Hunter Headen,… un hombre normal, muy inteligente y valiente, pero que tiene una maldición a cuestas…

-¿Cuál es esa maldición?- preguntó Snake.

-Creo que es un extraño trastorno de personalidad, un desorden bi-polar, ¿sabes?... pero no estoy muy seguro. A veces pareciera que es una… “cosa” que habita dentro de él y que cuando toma posesión de su cuerpo, se transforma en un asesino crudo e imparable. El gobierno lo ha llamado para eliminarme… esa es la razón por la cual está aquí.

-Ya veo…- me dijo Snake mientras contaba sus balas.- No hay mucho que hacer con los psicópatas mas que meterles un balazo antes que salgan con alguna idiotez…

-Así mismo pienso yo, bueno pensaba…

-Te sorprendería ver la cantidad de orates que andan por el mundo escuchando voces, uno menos créeme que nadie lo notaría… ¿te quieres encargar tú de él?

-No.- Le contesté a Snake.- Yo conocí al verdadero Hunter Headen, no merece morir por el ser que habita en su interior… no lo mataré, ni tú tampoco.

-¿No acabas de decirme que el gobierno lo seleccionó para matarte?

-Así es, pero al asesino que alberga en su cabeza, no al hombre que conocí… trata de entender…

-Como quieras, Kennedy…- me contestó Old Snake con una sonrisa.- Va a ser tu funeral. Ahora, en cuanto a lo que nos compete… Tengo a dos informantes de Filantropía infiltrados en esta planta, si todo se va al demonio… nos ayudarán… lo importante es encontrar a un hombre llamado WhitePony, él, solo él sabe la clave de acceso para la base de datos BIG. No nos sirve muerto, ¿comprendes?

Me limité a asentir con la cabeza.

-Bien, vamos…

Agazapados nos deslizamos hasta el interior de la base, observamos el momento justo en el que cuatro soldados metían a Hunter Headen al interior de un cuarto y se encerraban con él. De un comienzo estuvo en mis planes rescatarle, pero debía encontrar el momento justo, eso llegó cuando Old Snake volvió a dirigirse a mí y me preguntó:

-Oye, Kennedy… ¿Cuánto mides?

Tras mi respuesta y en tan solo cosa de segundos abordamos a uno de los soldados de aquel recinto militar, Snake lo aturdió con el mango de su pistola y le arrastramos hacia un rincón mas escondido.

-Vístete con el uniforme de este soldado y procura llevar la visera de tu gorra bien baja para no mostrar mucho tu rostro.- me indicaba Old Snake.- No podemos llegar y actuar sin antes dar con Whitepony, si iniciamos un tiroteo o algo así, él será el primero en huir y podemos despedirnos de obtener la base de datos BIG. Escúchame, infíltrate y quiero que tengas contacto visual con él, luego nos reunimos aquí mismo… no te enfrentes a él solo, ¿comprendes?

-¿Porqué no te disfrazas tú?...- pregunté.

-Mi rostro ya es reconocido por WhitePony… tú eres extraño para ellos, pasarás como un soldado más.

Finalmente accedí a seguir con el plan de Snake, una vez que acabé de vestirme con el uniforme del soldado que ya habíamos maniatado, le pedí una cosa:

-Bien, iré por Whitepony, pero tú debes hacer algo por mí…

-¿Qué cosa?- me preguntó escupiendo al suelo.

-Quiero que saques a Hunter Headen de aquí, sácalo de ese cuarto…

-Estás loco…

-Puede ser. Vamos, sé que esto es pan comido para ti.- volví a animarle.- Será un obstáculo menos si logramos hacernos cargo de él lo antes posible.

-¿”Hacernos cargo”?- me preguntó simulando un arma de fuego con su mano derecha.

-Sin matarlo…., escúchame, Snake. NO LO MATES, y yo no haré nada estúpido con Whitepony, dame tu palabra.

Tardó un momento en decidirse a responder, pero finalmente accedió y lo hizo. Nos dividimos… él iría a ver mi asunto de Hunter Headen y yo atendería su asunto con Whitepony.

Old Snake se escabulló hasta el cuarto donde aquel grupo de soldados había encerrado a Hunter Headen, luego de comprobar que nadie se acercaba comenzó a trabajar en la cerradura de la puerta, en cosa de 6 segundos ya lo tenía resuelto, la puerta se abrió solo un centímetro y a través de esa ranura observó que en el interior todo estaba quieto y calmo. Comenzó a abrir la puerta cautelosamente hasta que se aseguró que no había peligro en el interior. Una vez adentro lo único que pudo ver fueron varios cadáveres de soldados muertos en el suelo, indicios de una verdadera masacre, sin embargo no logró ver a Hunter Headen por ningún lado. Snake notaba algo extraño… pero no sabía que era… entrecerró sus ojos sospechando algo, pero era muy tarde ya, a sus espaldas Hunter Headen quien había permanecido disfrazado como uno de los soldados muertos se puso de pié lentamente esbozando una diabólica sonrisa para luego abalanzarse sobre Snake.

-¡Maldito orate!- gritó Snake intentando sacarse de encima a Hunter.-¡Sabía que planeabas algo!

-Jejeje… tranquilo, abuelito…- le decía Hunter a Snake mientras lo ahorcaba.- tratemos de disfrutar ambos de nuestro momento a solas, ¿eh?

-¡Suéltame!- gritó Snake logrando apartarle con una fuerte patada, luego desenfundó su arma y le apuntó, pero Hunter fue más rápido y con una certera llave dobló su brazo y obligó a Snake a apretar el gatillo varias veces agotando así todos los tiros de la pistola, luego le remató con un puñetazo en la nariz…. Snake retrocedió unos pasos bastante adolorido.

-Ahora, antes de que sufras una muerte dolorosa… dime, ¿Dónde está Leon?

Snake solo sonrió, luego lentamente se quitó la chaqueta y la arrojó al suelo para finalmente adoptar una pose de lucha.

-¿Quieres información, niño?... ven a buscarla…

Tras un largo rato de ir de un lado a otro, pude dar con el nombre de Whitepony y posteriormente con su ubicación, se encontraba en el ala de observación de los prototipos BIG. Tuve que hacerme de una tarjeta de identificación para poder acceder hasta aquel sector de la base. Yo estaba listo para enfrentar a la muerte y a medida que me acercaba al encuentro con Whitepony me daba cuenta de que estaba saliendo todo demasiado fácil… no había personal en los pasillos, ni ninguna clase de guardias, a medida que avanzaba la sensación de soledad se acrecentaba de forma alarmante, tanto que comencé a sudar como un cerdo que sabía que iba a ser sacrificado en el matadero. Me detuve justo frente al acceso del cuarto de observación, eché un vistazo a mi pistola, respiré hondo y finalmente entré……..

Ante mis ojos apareció un hombre de contextura maciza, era bastante alto, llevaba boina militar y observaba con cierto aire de frustración por una ventana hacia los dispositivos BIG que se ensamblaban en un nivel mas abajo.

-¿Dónde está Old Snake?- me preguntó Whitepony dejándome totalmente desconcertado.- Tú les has asistido en su camino hasta acá, pero… ¿Dónde está él?

-Él… él está oculto, Whitepony…- le respondí intuyendo que el juego había terminado.

-Lástima…, me hubiese gustado mucho charlar con él… aunque fuera por última vez… supongo que han venido a detener lo de los prototipos BIG, ¿no es así?

-Así es.- contesté apuntándole con mi arma de forma decidida.- escucha, no quiero jalar este gatillo, pero en mi interior estoy rogando para que nos facilites las cosas.

-Me parece sensato.- contestó.- Ten, esto era lo que buscaban.

Acto seguido me arrojó una unidad de almacenamiento externo para conectar a un PC, similar a un pendrive. Lo cogí en el aire con mi mano izquierda.

-Ahí está la base de datos que buscaban sobre todos los prototipos BIG, mas planos, diagramas, etc.

-Escucha, no soy tonto… ¿es una trampa?, ¿porqué nos estás ayudando, Whitepony?

-Porque en primer lugar… no soy ese tal “Whitepony”

-¿Ah no?... entonces, ¿Quién es Whitepony?

Aquel sujeto me apuntó hacia un rincón en donde yacía el cadáver de un hombre de edad avanzada, cuya herida en su pecho supuse le había provocado la muerte. Whitepony estaba muerto, entonces… ¿con quien demonios estaba hablando?

-¿Quién eres?....- pregunté confundido ante la situación que se me presentaba.

-Ni yo mismo lo sé…- me contestó. Luego se dio vuelta hacia mí con la clara intención de despedirse.- Creo que Snake nos hubiera contestado a ambos esa pregunta. Dale mis saludos…

Justo cuando pasó a mi lado se detuvo para advertirme una última cosa:

-Por cierto, mis hombres depositaron explosivos en este lugar… estallarán dentro de 7 minutos, les aconsejó largarse lo antes posible.

Acto seguido, aquel sujeto abandonó el cuarto y de ahí jamás he vuelto a verle hasta la fecha. Recuperándome de la impresión y del extraño encuentro, me largué con la intención de encontrar a Snake lo antes posible, debía decirle sobre la bomba. Llegué hasta el cuarto donde habían encerrado a Hunter Headen rogando que por favor se encontrara ahí, y felizmente así fue… aunque “felizmente” no ceo que sea la apalabra correcta para describir lo que vi. Old Snake y Hunter Headen se encontraban peleando de forma bastante violenta cuando entré a la habitación.

-¡Te haré jirones la columna, maldito anciano!- amenazaba Hunter a un extenuado y malherido Snake.- ¡Oh!, ha llegado el príncipe, jeje… esto se pondrá muy interesante… mataré a ambos por el mismo precio

-Hunter ya basta…. Debemos largarnos, no hay tiempo para esto…- le dije.

-¿Tiempo?... ¿qué es el tiempo sino una mera ilusión provocada por el hombre y su nefasto intento de querer controlar el curso de su vida y los acontecimientos?, muy mal, Leon…. ¿intentas persuadirme?... inténtalo de nuevo.- me dijo con sus ojos de loco mientras escupía al suelo.

Era imposible razonar con el “yo interno” de Hunter Headen, mientras estaba en ese trance se convertía en otra persona, mucho más fuerte y ágil… un verdadero dolor de cabeza.

-Snake, una bomba estallará dentro de 5 minutos, ayúdame a sacar a Hunter…, por favor.

-¿Una bomba estallará?, diablos, Kennedy ¿Qué fuiste a hacer?

-No fue idea mía, luego te explico….- le contesté mientras me fijaba en la bilis chorreante que brotaba de la boca de aquel orate.- por favor, ayúdame con Hunter.

-Tu amigo me ha roto ya un par de costillas, Kennedy… mas vale que valga la pena esto.


La lucha contra Hunter Headen fue realmente indescriptible, dos hombres contra uno y no logramos hacerle caer al suelo. Parecía que solo jugaba con nosotros, que tenía todo bajo control… era una situación muy estúpida, pues íbamos a morir producto de la bomba que estaba próxima a estallar y esa cosa no aflojaba en lo más mínimo. La situación terminó de ponerse fea cuando Snake cayó al suelo y Hunter puso su pié sobre su garganta para que no se levantara, luego aprovechó mi nerviosismo para llevar sus dos manos a mi cuello… comenzó a estrangularme.

-¿Ves mi rostro, Leon?... es el rostro de la muerte….- me decía mientras hacía cada vez más presión sobre mi cuello.- muerte que llevo en mis entrañas… en mi ser, en mi interior, dentro del cual no llevo más que hambre y dolor… locura y putrefacción, de eso estoy hecho….

Hunter continuaba con su monólogo de incoherencias, mientras un hormigueo comenzaba a recorrer mi cuerpo, sin duda eran ya los síntomas de la asfixia… de pronto pude notar que Snake intentaba darle patadas a Hunter Headen, yo también comencé a hacerlo, pero era inútil… finalmente la criatura retrocedió asombrada y nos soltó a ambos.

-Dame tu arma, yo lo mato….- me dijo Snake poniéndose de pié.

-No puedo creerlo…- dijo de pronto Hunter Headen bastante emocionado.- ustedes dos, mis preciosuras…. Son como yo, jamás se rinden, ¡oh, my cat!- exclamó feliz de la vida.

-¿Y a este que le pasa?- peguntó Old Snake.

-Ni idea…-le respondí sobándome el cuello.- ¿Qué sucede, Hunter Headen?

-Jejejeje… ¡se acabó el show, muchachos!, Tú y el anciano me han hecho ver que son my parecidos a mí, digo… aún cuando estaban a punto de morir insistieron con sus golpecitos de niña jajaja, ¿no se dan cuenta? ¡ son de lo más adorable que he visto!, ¡alegrense, son libres!

Luego Hunter nos abrazó a ambos y nos besó en la mejilla.

-Ahora me voy, los dejo con el insufrible y patético hombre que alberga este cuerpo… pero aún cuando me encuentre preso en el cerebro y en los pensamientos de este sujeto, los recordaré, y eso mis gatitos angora, me reconfortará….jejeje, chau, chau, chauuuuuuuuuuuuuuuuuu

Finalmente la cosa que habita en el cerebro de Hunter Headen volvió a su cárcel interna, pero antes de ceder su cuerpo al hombre al que pertenece deben pasar unos minutos en los cuales sufre un breve lapso de inconsciencia.

-Ya está, vamos… ayúdame a cargarlo hacia fuera…- le dije a Snake.

Apenas y alcanzamos a salir unos segundos antes de que todo aquel recinto militar volara en mil pedazos, sin duda ese extraño hombre hablaba con verdad. Le conté todo a Snake sobre aquel sujeto y pareció reconocer al instante de quien le hablaba aunque no se porque sentí que no deseaba que yo supiera quien era…

Hunter Headen volvió en sí a los pocos minutos mientras esperábamos el rescate dispuesto por filantropía en las profundidades del bosque, fue sorprendente, era otro hombre… hizo las pases con Snake y se disculpó por todo.

-Leon, quisiera agradecerte…- me dijo estrechándome su mano.- no cualquiera hubiese hecho lo que tú hiciste por mí.

-Está bien, Hunter… ¿estarás bien ahora?

-Sí, pasará un largo rato hasta que esa voz no vuelva a molestarme otra vez… es una pesadilla, ¿sabes?

-Lo imagino…- contesté apoyando mi mano sobre su hombro.- hey, cualquier cosa que necesites…. Intenta ubicarme, ¿de acuerdo?, yo te puedo ayudar.

-Gracias, Leon. Viví mucho tiempo engañado por esta voz, me obligaba a dejarle salir diciéndome que necesitaba sangre ya que sin ella mis órganos internos de pudrirían…, en fin, merezco la cárcel… maté a mucha gente inocente, primero al fiscal y luego a los hombres en aquel avión.

-Haré todo lo posible para que consideren los tormentos de los cuales has sido víctima, y yo al igual que tú, también deberé enfrentar a la justicia… estoy culpado de traición a la patria, ¿recuerdas?

-Dios bendiga a Norteamérica…- ironizó de pronto Old Snake.- todavía puedes dejar de rendirle tantas cuentas al tío Sam, Kennedy, y unirte a nosotros….

-Lo consideraré, Snake…- le contesté sonriendo.- cuida mucho la información del dispositivo externo.

-Es oro puro, así lo haré.- me dijo mientras masticaba su tabaco.

-Ha sido un privilegio verte trabajar.

-Lo mismo digo…- me contestó mientras en el cielo ya divisábamos el helicóptero de rescate.


Un infierno me esperaba en casa. He asistido ya a 3 audiencias donde he tenido que explicar todo delante de las principales autoridades del país, pasado mañana debo ir a una última en donde (para mi favor) habrán veedores internacionales y ahí las ratas que hacen de la guerra un sucio negocio ya no pueden seguir escondiéndose…

Y es que tal como me dijo Snake… “las guerras han cambiado”




FIN




... ¿quien diablos fue el que nos ayudó?

LEON S. KENNEDY 02:20 A.M.


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domingo, 24 de julio de 2011

Patriotas
















CAPITULO 5



Un hombre armado con un pedazo de vidrio de espejo roto salió del baño de un avión... se acercó a uno de los agentes de seguridad y le rebanó el cuello, luego cogió su arma y comenzó una gran balacera a más de 50 mil pies de altura acribillando a todo el personal que viajaba con él, incluido el piloto…

Tomó uno de los paracaídas y se lanzó del avión momentos antes de que este se estrellara muy cerca de nuestra posición… Hunter Headen estaba tras mis pasos, según me había confirmado Sussman.


La noche se había dejado caer con prontitud en medio del frondoso bosque asiático. Tras caminar un par de kilómetros nos encontramos con el primero de nuestros obstáculos… una alambrada con una señalética militar donde se nos ordenaba retroceder y abandonar aquel perímetro, obviamente hicimos caso omiso y Snake haciendo uso de un mini-laser del tamaño de un llavero fabricó una entrada a través de la alambrada y así logramos pasar al otro lado.

Continuamos nuestra travesía en medio de la noche, acompañados únicamente por el sonido alborotante de cientos de insectos y aves nocturnas. Quise hablar con él, comentarle lo de Hunter Headen, no sé… decirle algo, pero Old Snake ya me había prevenido de lo peligroso que era alzar la voz dentro de una instalación militar secreta. Tras caminar por cerca de 40 minutos entre frondosos árboles y fétidos pantanos llegamos a una nueva alambrada, esta vez era más alta que la anterior (lo que ya es mucho decir) y de un grosor más marcado, un letrero amarillo nos advertía de los 1000 voltios de electricidad que contenía la alambrada y que de seguir adelante el personal militar estaba autorizado para tirar a matar.

-Lindo, ¿eh?- me susurró Old Snake mientras buscaba algo entre los bolsillos de su chaqueta.

-Supongo que esto no nos detendrá…- le dije también en voz baja.

Sacó de entre sus bolsillos un enorme puro cubano y lo depositó entre sus labios, comenzó a masticarlo como si fuera chicle… sabía que era incapaz de encenderlo. De pronto cogió una rama de árbol que se encontraba en el suelo y la arrojó contra la alambrada, un chispazo iluminó por un par de segundos la oscuridad de la noche y la alambrada expulsó la rama del árbol un par de metros más allá. Realmente se encontraba electrificada.

-Tenía que cerciorarme…- me contestó Snake mientras masticaba el tabaco del puro.- Bien, esto es lo que haremos…

Old Snake mató a una ave de gran tamaño que habíamos divisado en un nido de los tantos árboles que rodeaban la zona, la cogió y la incrustó entre la alambrada con la ayuda de un palo que agarró firmemente con sus dos botas de cuero para aislar la corriente, nos alejamos y la pobre ave no dejaba de temblar sacudida por los voltios de electricidad, al cabo de unos minutos comenzó a salir olor a pollo frito…

-¿Qué estamos haciendo?....- le susurré mientras estábamos escondidos tras unos arbustos.

-Llamando la atención de alguien…- me contestó mientras comenzó a aventar cosas a la alambrada que provocaban más chispazos.

Al cabo de unos minutos divisé un movimiento tras la alambrada, un soldado se acercaba al lugar del incidente.

-… es un animal atrapado en la cerca, Fox 2, ¿me copia?- decía el soldado por radio mientras examinaba al ave.- terminará por quemar la fuente, debo desatorarlo…

Old Snake sacó una suerte de rifle en miniatura y montó la mira telescópica en él, yo observaba sus movimientos con atención, ninguna expresión se reflejaba en su rostro y ningún músculo se movía siquiera un centímetro.

-Fox 2, solicito que corte la electricidad de la alambrada por un segundo para sacar este desastre.- dijo el soldado por radio.- Perfecto, no tardaré más de 30 segundos…

Acto seguido el soldado comenzó a sacar el ave enredada en los alambres, un apagado sonido llegó a mis oídos y luego vi como aquel soldado caía muerto al suelo. Old Snake lo había asesinado con el rifle silencioso.

-¡Corre!- me dijo mientras salía disparado de nuestro escondite hacia la alambrada.

Le seguí y ambos comenzamos a escalar la cerca con la mayor rapidez posible, alcanzamos a descender del otro lado justo un momento antes que la electricidad fuera dada nuevamente. Íbamos a continuar, pero cogí a Old Snake por el hombro…

-Hey…- le detuve en voz baja.- sería bueno no matar a nadie, a no ser que sea absolutamente necesario.

Me miró un poco confundido y luego esbozó una forzada sonrisa.

-¿Cómo crees que vamos a llegar hasta la base de datos de BIG?... ¿pidiéndolo por favor?- me preguntó.

En ese minuto la radio del soldado muerto comenzó a sonar.

-[Fox 2 a Fox 6, ¿todo bien con la diligencia?]- preguntaba la voz a través de la radio.

-De haber reducido a ese soldado…- volví a insistir.- ahora estaría respondiendo al de la radio fingiendo que todo está bien… ¿Comprendes?

-Tarde o temprano nos van a descubrir, Kennedy…- me contestó Snake.- es cosa de tiempo para que jalemos nuestros gatillos contra ellos y ellos contra nosotros.

-[Fox 2 a Fox 6, ¿está todo bien en la alambrada?, ¿me copia?]- volvió a preguntar el de la radio.

Snake y yo nos miramos en silencio, ambos sabíamos que en un par de minutos ese tal Fox 2 sospecharía y vendría a este sector de la alambrada a ver que había ocurrido, y aunque escondiéramos el cadáver del soldado… era tan solo cosa de tiempo para que se percataran de que algo malo ocurría, y esos minutos de ventaja o desventaja eran los que a mí me preocupaban. Old Snake cogió el radio y con absoluta frialdad respondió escuetamente:

-Fox 6 a Fox 2, todo bien con la alambrada, cambio y fuera…- dijo y nos quedamos en silencio a ver si Fox 2 contestaba.

Pasaron largos segundos hasta que de la radio sonó una incrédula voz que nos respondió:
-Correcto, Fox 6.

Me estremecí, no tenía ninguna duda de que habían desconocido la voz de Old Snake y que ya habían comunicado la alerta, pero Snake… sujeto frío y experimentado no se preocupó en lo absoluto.

Avanzamos lo que quedaba de distancia a un ritmo más lento, ocultos entre las sombras de los arbustos que se iban haciendo cada vez más escasos. Momentos antes Old Snake me había advertido sobre la presencia de francotiradores tras la segunda valla de cualquier perímetro militar protegido,… y no tardamos en enfrentarnos a esa aterradora realidad. Snake me tapó la boca con su mano y me hizo agacharme junto a él.

-Te tapo la boca…. Porque eres un niño…- me dijo con voz ronca.- los niños lloran… y no quiero que llores, ¿nos entendemos?

Solo me limité a mirarlo a los ojos, lentamente me destapó la boca y dijo:

-Francotirador distraído, oculto en lo alto de un árbol a las 1300, yo me encargo.

Comenzó a preparar su rifle en miniatura, montó la mira telescópica con sumo cuidado mientras yo intentaba encontrar al francotirador, al cabo de un momento lo descubrí… arriba de un árbol vigilando la zona, vestía completamente de negro.

-Supongo que no hay otra salida…- le dije reprochando el acto de matar solo porque sí, siempre he creído que es mejor reaccionar a un ataque que propiciarlo. Pero Old Snake no habla mi mismo idioma.

-Lo siento, Kennedy… pero este ya no es tu juego.- me contestó arrojándome en mi cara mis propias palabras.-… de hecho, esta ya no es tu historia…

Acto seguido disparó de forma certera y el francotirador cayó muerto al suelo desde lo alto de aquel árbol. Esperamos unos segundos antes de movernos por si había otro movimiento y como nada ocurrió proseguimos nuestro acercamiento a la planta militar BIG. Avanzamos varios metros hasta aproximarnos hacia las primeras bodegas de almacenaje, Snake y yo nos ocultamos tras unas curiosas cajas de acero y a nuestros oídos llegaron las primeras voces de los soldados que daban órdenes y andaban de un lado a otro. Ocultos a la vista de los demás continuamos moviéndonos entre las sombras y logramos aproximarnos hacia una posición más cercana de la primera bodega de almacenaje. En ese momento no tenía idea de cuál era el plan de Snake y como odiaba su silencio…

-¡Ven acá, maldita basura!- exclamó la voz de un soldado a mis espaldas…. Quedé paralizado, por un momento creí que nos habían sorprendido, pero no era así… se trataba de una increíble coincidencia, el soldado había sorprendido a un tercer intruso en la planta BIG.

-¡Miren lo que he encontrado!- dijo el soldado llevando al intruso frente a sus superiores.- Estaba oculto tras uno de los vehículos.

-¿Cómo te llamas?....- le preguntó uno de los oficiales.

-(….)

-¿Con que no quieres hablar, eh?, ¡ya vas a hablar, pedazo de mierda!- le gritó el oficial lanzándole un escupitajo a la cara, el intruso solo sonrió mientras la saliva caía por su rostro.













Al ver aquella sonrisa se me heló la sangre, era él… su sonrisa, su cabello, sus ojos color violeta que indican cuando está poseído por su “yo” interior… era Hunter Headen…

-¡Oh, por Dios!- exclamé.- es Hunter Headen.

-… ¿Quién demonios es Hunter Headen?- me preguntó Snake sin entender nada.







...linda fiesta era la que iba a comenzar

LEON S. KENNEDY 00:55 A.M.


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martes, 19 de julio de 2011

Patriotas

















Capitulo 4


Un avión privado llevaba a un par de oficiales del pentágono más miembros de la armada norteamericana directo a Asia. Uno de los generales recibió una llamada a bordo.

-Diga…. Si, señor. Todo está saliendo como lo planeado. En alrededor de 10 minutos llegaremos a la zona…. Si, señor….- respondía el general, de pronto echó una mirada por el pasillo hacia el fondo en dirección al baño.- Pues, si… se le ve bien, aunque hace ya 10 minutos que Hunter Headen ha entrado al baño y aún no sale.


… “no puedo”… “no puedo dejarte libre”… pensaba para sí mismo Hunter Headen arrodillado junto al lavamanos. “Entiende que no deseo continuar arruinando mi vida”…

-“Líberame, Hunter… tú y yo sabemos que no tienes más opción”- le respondió de pronto una voz.

-… no puedo hacerlo… no contra Leon… - contestó Hunter hundiendo el rostro entre sus manos.-… estoy harto de esta situación, harto de tener que escucharte…

-“¿Acaso quieres regresar de nuevo a “Summer sun”?”- volvió a insistir la voz.-“Te comportas como un pusilánime, ¡un maldito mediocre!... ¡vamos!, sé valiente y libérame una vez más!”

-¡Silencio!- exclamó Hunter Headen mientras que lentamente se puso de pié para mirarse en el espejo.- No eres mas que una vil voz asquerosa prisionera de mi cuerpo y mis pensamientos… ¡yo soy el que manda!, ¿acaso se te olvida?, ¿Qué pasa si me doy un tiro, eh?... ¿Qué harías tu?, ¿acaso quieres que me de un tiro?, ¿eh?...

La voz no contestó, hubo un largo silencio y Hunter Headen volvió sonreir.

-Eso es…, guarda silencio. No volveré a matar a nadie nunca más…- dijo Hunter frente al espejo.- Hoy es un gran día para mi libertad. Celebro tu silencio, maldita voz asquerosa… ¡que tu silencio perdure por siglos!- exclamó Hunter Headen con aire triunfal mientras observaba su propio reflejo, sin embargo… al cabo de unos segundos comenzó a temblar y una mueca de dolor se dibujó en su rostro.

-“Tus órganos… Hunter”…- volvió a decir la voz.-“sin sangre tus órganos se deterioran cada vez más”… “me necesitas y tú lo sabes”…

Hunter Headen se llevó ambas manos al rostro y comenzó a llorar amargamente sumido en un sepulcral silencio. Él sabía que la voz en su cabeza le llevaba ventaja… esa voz sabía que era solo cosa de tiempo para que volviera a ser liberada. Por ello la voz en su interior comenzó a reír… elevando su ritmo hasta convertirse en estrepitosas carcajadas que sacudían su cerebro. Hunter Headen volvió a verse en el espejo y con un puñetazo lo hizo añicos haciendo que los pedazos de cristal cayeran estrepitosamente por todo el cuarto de baño.

-Perdóname, Leon…- dijo Hunter Headen invadido por el más grande de los tormentos mientras que la voz continuaba con su macabra risotada.

Lentamente Hunter Headen fue cediendo su personalidad a la “cosa” que le habitaba, la voz se adueñó de su cuerpo, sus ojos se tornaron color violeta… el asesino comenzaría a matar una vez más.



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Old Snake es un tipo extraño… si algo he aprendido de él es que no dejo de sorprenderme por las manipulaciones y engaños que hay tras los gobiernos y quienes los dirigen…

El sujeto al que estaba ayudando, aquel que contactaba a un mercenario retirado en una de las esquinas de aquel pueblito en el que nos escondimos, era ni más ni menos que un clon… un clon de sí mismo antes llamado solid snake. Según me reveló contaba con poco tiempo de vida pues sus células habían sido programadas para vivir menos que cualquiera de nosotros, algo parecido a la pena comencé a sentir por él, pero luego entendí que Snake no era de los que agradecía tal clase de sentimientos, sino que todo lo contrario…

Old snake terminó de charlar con aquel sujeto en la calle y regresó adonde yo estaba sentado bajo un cobertizo.















-Todo bien hasta el momento. Ese mercenario nos conseguirá un pequeño arsenal dentro de una hora…- me dijo.

-Perfecto, por cierto ¿porqué llevas ese cigarrillo apagado en tu boca?- le pregunté al no aguantar más mi curiosidad.

-Solía ser un fumador empedernido…, pero juré llegar hasta el final de mis días sin tabaco.- me contestó sentándose junto a mi lado.- llevar un cigarrillo sin encender me ayuda a llevar mejor la ansiedad, ¿sabes?

-Comprendo…- en ese instante recibí en mi intercomunicador una señal, al chequearla comprobé que mi amigo del FBI me había enviado el mapa de observación satelital de los EEUU.- Genial, me enviaron el mapa satelital.

-Me alegro, ya no soportaba andar con esta capucha…

-Ni yo.- contesté.- Gracias a esto podremos llegar a la planta BIG lejos de la mirada atenta de los satelites.

-Kennedy, yo no me fiaría tanto de tus amigos del FBI…- me dijo de pronto Old Snake.

-Confío solo en una persona, Sussman es como un hermano para mí.

-Solo ten cuidado… he tenido que matar a varios “hermanos”…-me contestó.

Examinamos el mapa satelital de nuestra zona e identificamos al instante una ruta ciega hasta la planta de los prototipos BIG, Filantropía conocía ya su ubicación desde hacía un mes gracias a un informante que posteriormente fue asesinado por el gobierno norteamericano introduciendo veneno en una de sus comidas. BIG es la nueva apuesta comercial-guerrillera que pretende financiar las grandes guerras del futuro, Japón y EEUU formaron esta alianza secreta hace 8 años atrás con el fin de obtener el monopolio armamentista que auspiciarían las guerras futuras. Hoy por hoy ya se pueden ver los primeros síntomas de conflictos internacionales que ya han dejado de ser gatillados por limites territoriales o por ideologías radicales… hoy en día las guerras han cambiado y donde antes había una bomba de destrucción masiva que destruir, hay un fondo petrolero del cual apoderarse…

BIG es el futuro, es el auspiciador, es el nuevo generador de conflictos… América se encargará de patrocinar cualquier rencilla de cualquier país del mundo con sus nuevas armas construidas en conjunto con Japón… y si esas guerras no aparecen… las crearán de algún modo u otro…

Como me dijo Old Snake… “las guerras han cambiado”.


Al atardecer salimos de aquel pueblito equipados con las armas que aquel mercenario contacto de Filantropía dispuso para ambos. Caminamos largo rato encapuchados hasta llegar a la zona ciega, y cuando llegamos ambos intercambiamos una mutua mirada de apoyo.

Había llegado la hora de ensuciarse las manos y de adentrarnos en aquel espeso bosque…


















... listo para la guerra.

LEON S. KENNEDY 01:56 A.M.

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miércoles, 13 de julio de 2011

Patriotas: Amigos

















CAPITULO 3



Una reunión extraordinaria se desarrollaba en dependencias del pentágono donde el alto mando del ejército japonés se reunía con sus pares del ejército norteamericano, la situación parecía compleja.

-Por favor, asiento, caballeros. Espero sepan disculpar esta reunión tan poco ortodoxa y fuera de contexto.

-Cuento con poco tiempo, señores.- dijo de pronto un general de la armada japonesa con un extraño acento inglés.- No nos detengamos en los detalles de la huída del mercenario aquel en Asia, sino más bien veamos qué podemos hacer para prevenir un nuevo asalto a los prototipos BIG.

-Lo ideal sería trasladar la central de producción a otra parte, pero es una operación tan costosa como poco práctica… las filtraciones de información que hemos sufrido de un tiempo a esta parte hace cualquier acción “secreta” que podamos tomar sea inútil.

-Filantropía no nos dará tregua y será cosa de tiempo para que descubran la zona de producción en serie de los BIG, si es que ya no la han descubierto…

-Caballeros, no nos compliquemos más la existencia…- habló de pronto un general norteamericano de alto grado.- Comencemos eliminando a quienes ya hemos identificado y santa solución, ¿o es que queremos esperar a que asalten la central de producción BIG?

-No debemos precipitarnos…-aconsejó un alto oficial del FBI.- no olvidemos que quien ha ayudado al mercenario es uno de los nuestros, preferiría esperar a que podamos establecer comunicación con él antes de tomar cualquier medida exagerada y extrema.

-¿Esperar a comunicarnos con él?..., ¿para qué?, ¿para que nos siga contando mentiras?

-Perdón…- interrumpió de pronto uno de los oficiales japoneses.- me gustaría conocer los nombres de los dos individuos implicados

-Uno es Old Snake, ese es su alías y es miembro de Filantropía. El otro es de los nuestros…su nombre es Leon Scott Kennedy.

-Mmmm… ustedes conocen mejor a ese sujeto Leon Kennedy.- dijo el general Japonés.-¿es capaz de cometer una barbaridad?

-Es difícil poder decir eso… Leon ha sido siempre un buen elemento para el gobierno de los EEUU.- contestó un oficial del pentágono.- Sin ir más lejos rescató a la hija del ahora ex presidente en una misión que lo trasladó a un pueblito en Europa. Es un verdadero patriota, sé que él respeta su bandera y nuestro himno nacional, pero francamente no comprendo su actitud y me cuesta creer que haya ayudado a escapar a Old Snake siendo que él mismo lo atrapó…

-Leon es tan patriota como ese terrorista de Old Snake, ambos por un maletín lleno de dinero son capaces de cantar el himno alemán antes que el nuestro.- dijo de pronto el general americano.- Era cosa de tiempo para que se rebelara contra nosotros… ¡por favor!, ¿acaso no han seguido sus últimas acciones?, Leon se estaba convirtiendo en un verdadero dolor en el culo para nuestro gobierno…y ahora explotó en nuestras narices, era inevitable que nos traicionara.

-Caballeros, no perdamos la cabeza.- volvió a insistir el oficial del FBI.- Hasta donde sabemos Leon puede estar haciendo ahora mismo de doble agente infiltrado en filantropía…

-Jajajaja…- rió a carcajadas un miembro del comité militar americano.- muy tarde para eso. Vaya con ese cuento donde un niño de 6 años. Señores, hemos de tomar una decisión ahora,… tal como cuando lo hicimos para asesinar al presidente Kennedy, tal como cuando lo hicimos para asesinar al presidente Lincoln, tal como cuando planeamos el auto atentado contra las torres gemelas…a veces hay que tomar decisiones difíciles y crudas por el bienestar de nuestro país, de nuestra bandera, de nuestro himno, de nuestro 4 de julio…

-Lo mismo digo yo.- dijo poniéndose de pié el general americano de alto grado.- Leon hizo mucho por nosotros, y cuando muera le llevaremos rosas a su tumba, pero ahora hay intereses mas grandes y no podemos permitir que la alianza estratégica entre Japón y EEUU se derrumbe solo por dos antisociales, caballeros, si están de acuerdo en que hay que “eliminar” estas dos espinas… por favor pónganse de pié.

Uno a uno los miembros de aquella reunión fueron poniéndose de pié como señal de aprobación para el acto de asesinar a Old Snake y Leon Scott Kennedy, el oficial del FBI fue el último en ponerse de pié. Más tarde aquel miembro del FBI logró ponerse en contacto con Leon interviniendo la línea de un teléfono público para que esa llamada no fuera rastreada por nadie.

-Leon, escúchame… vengo de la reunión con los “peces gordos”, tengo malas noticias… hemos resuelto asesinarte…. ¿Cómo dices?, si lo sé…. No me creyeron la patraña esa de que podías ser doble agente…. Los del lado del pentágono llevan planeando esto de hace días…. Ajá…. No, no tengo idea como planean hacerlo, apenas tenga información me comunicaré contigo… escúchame, ahora me seguirán para todos lados porque me vi muy de lado tuyo durante la reunión, ¿entiendes?, ahora debo aparentar que colaboro con ellos para no levantar mas sospechas…. Intentaré seguir ganando tiempo, pero esto se pondrá muy difícil….. escúchame, intentaré hablar con el presidente por ahora y además te enviaré un mapa del radio de observación de nuestros satélites… por favor, mantente alejado de los cielos despejados…. Está bien, bueno…. Te cuidas, amigo mío. Suerte.

Más tarde un fiscal del gobierno de los EEUU entraba a un recinto policial, se iba a entrevistar con alguien y mientras caminaba por el pasillo un oficial de seguridad le daba ciertas instrucciones.

-Por favor, nada de lápices, ni objetos cortopunzantes.

-¿Nada de lápices?... solo debe firmar un documento, por amor de Dios…- comentó el fiscal mirando por sobre sus anteojos.

-Hey, NADA DE LAPICES…- insistió el oficial acentuando sus palabras.

Al fiscal lo hacen entrar a una sala donde unos guardias tienen a un hombre sentado junto a una mesa en el centro de la estancia. Tras un enorme espejo falso, miembros del pentágono y del gobierno norteamericano observan todo a través de una sala contigua.

-Buenas tardes.- saluda el fiscal a aquel hombre.- Disculpe la tardanza.

-Páselo por alto.

-Y por favor disculpe que lo hayamos sacado de sus quehaceres para traerle hasta acá…

-Páselo por alto.

-Necesitamos un favor de ud.- dijo el fiscal.- Le enseñaré dos fotografías y usted me dirá si reconoce a alguno de ellos.

-Mmm… si, si reconozco a uno, al otro la verdad que jamás lo he visto en mi vida.

-¿Quién es el que usted ha reconocido?- preguntó el fiscal acomodándose sus anteojos.

-Kennedy, Leon Scott Kennedy…

-Bien. Señor Headen… Hunter, el gobierno necesita eliminar a estos dos hombres considerados enemigos públicos.

-¿Ah sí?

-Así es, y confiamos en que usted es el asesino perfecto. Barajamos varios nombres junto con el suyo, entre ellos a una asesina hasta ahora prófuga llamada Lilith, también a Caroline Batem…

-Dígame algo.- Interrumpió de pronto Hunter Headen.- ¿qué le hace suponer que voy a acceder?

-Pues porque usted es un hombre inteligente, señor Headen…- contestó el fiscal quitándose los anteojos.- y como es inteligente sabe lo que le conviene, ¿o es quiere volver otra vez a “Summer sun”?

-Oh, haberlo dicho antes.- respondió el asesino.- Espere, déjeme ver esa fotografía una vez más, por favor, ¿me presta sus anteojos?

El fiscal le entrega sus anteojos a Hunter Headen quien los abre y examina con pulcritud. De pronto, desde el otro lado del espejo uno de los oficiales se espanta.

-¡Oh, por Dios los anteojos!- exclama el oficial agitado.- ¡hagan algo!

Pero es tarde, en un abrir y cerrar de ojos Hunter Headen entierra uno de los extremos del marco de los anteojos en el cuello del fiscal, quien cae al suelo atragantado por su propia sangre que no para de brotar por su profunda y mortal herida. Irrumpen los oficiales y demás miembros del gobierno, algunos enfermeros asisten el cuerpo agonizante del fiscal.

-Que sea la última amenaza que recibo…. ¿bien?- dice Headen balanceándose en su silla.- Ahora sobre este “favor”, pues… conozco a Kennedy… no hay problema, será como sacarle la cabeza un pollo, y en cuanto al otro vejestorio… será como sacarle la cabeza al abuelo de ese pollo jeje…

-No queremos errores en esto, señor Headen. Demás está decir que si algo sale mal negaremos cualquier vínculo con usted…- dijo un miembro del gobierno presente.

Headen se levanta con ojos de loco y se acerca caminando lentamente hacia este hombre miembro del gabinete político, se acerca bastante, tanto que sus labios casi rozan los del otro hombre.

-¿Qué no se da cuenta… que tener o no tener vínculos con ustedes para mí es lo de menos?...- dice Hunter con una mirada que describe a la perfección el concepto de muerte.

… y es que ya no puede contener a la fuerza imparable que alberga en su interior, su “yo” interno clama por salir en busca de sangre…













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El diario de Leon S. Kennedy by Marcelo Carter is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 Unported License.

viernes, 8 de julio de 2011

Patriotas











CAPITULO 2





El avión nos llevaba a un reducido contingente militar y a mí a un secreto centro de operaciones en Asia, todo parecía fácil en el papel… solamente escoltar una canica que controlaba la energía de cualquier prototipo BIG alrededor del mundo. Si, lo reconozco la tecnología me ha venido pillando este último tiempo.

-Así que sin esa canica de poco y nada les servirá el BIG-X26 a Filantropía, ¿no es así?- le comenté a Jonson, capitán a cargo del contingente militar.

-Eso dicen, yo no sé que le ven tanto a esa cosa… tanta importancia por una estúpida canica.- me alegaba de forma sobreactuada.- Mis muchachos y yo somos felices solo con mantenerles el trasero a salvo.

-No subestimes el poder de una canica, Jonson.- le contesté.

Llegamos a eso del mediodía al aislado y desierto centro de operaciones asiático. Una tormenta de arena se veía a la distancia y descendimos del helicóptero de forma rauda, el ministro de defensa de Japón se encontraba ahí para recibirnos.

-Me disculpo en nombre del gobierno norteamericano por esta clase de exigencias.- le dije al ministro y a su traductor mientras estrechaba su mano.- Pero tenemos razones sólidas para creer que filantropía comenzará una incesante búsqueda por la canica, y este lugar es perfecto para esconderla mientras las aguas se calman…

Después de un breve diálogo entre el ministro y el traductor, este último se dirigió a mí.

-El ministro dice que es un gusto siempre colaborar con los Estados Unidos en este tipo de materias, y que es mejor entrar a la base ya que la tormenta parece acercarse…

Entramos y se trataba de un lugar mas bien abandonado y sucio, se le podía comparar a un enorme galpón que hace años nadie barría ni visitaba, en pocas palabras… era perfecto. Escuché que el ministro y el traductor volvían a intercambiar palabras.

-¿Está seguro de que este lugar le parece bien?- me preguntó el traductor.-El ministro lo encuentra bastante sucio…

-No, así está bien, así fue como lo pedimos.- contesté.- las condiciones de este lugar lo hacen perfecto para ocultar la canica, nadie siquiera podría sospechar sobre este lugar…


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Lleva horas esperando bajo una caja, de hecho hasta eso le da tiempo para dormir una pequeña siesta. El robot espía se encuentra monitoreando toda la entrada desde una viga del techo y eso le da toda la información que necesita… 6 soldados de los cuales 1 de ellos le dará todas las facilidades para cumplir con su objetivo, mas un agente del gobierno llamado Leon Scott Kennedy. La cámara del robot-espía no ha sido muy clara en delatar la posición de la canica, al parecer se encuentra en el maletín que lleva Kennedy en sus brazos. Desde esa posición, sin moverse de debajo de la caja puede observar todo a través del robot en miniatura, sin embargo al cabo de unos segundos el robot falla, al igual que su visor de pantalla y su reloj digital… “Un sistema de neutralización de energía, que ingenioso…”, piensa desde su escondite, “además del contador de armas, han dispuesto en el lugar bloqueadores para cualquier clase de aparato electrónico”. Así es, al llegar al lugar lo primero que descubrió fueron los sensores que hacen un conteo de armas una vez llegado el comité, es decir acusa al instante si además de las armas traídas por Kennedy y los soldados ingresa otra al perímetro por lo que ha tenido que infiltrarse totalmente desarmado, pero no había reparado en el bloqueador de energía estática. “Es lo de menos”, piensa mientras comienza a salir de la caja de cartón…

Activa el mimetizador de su traje con el medio ambiente en el que se encuentra y lentamente su cuerpo se vuelve rojo carmesí, igual que los ladrillos que están tras él… todo esto mientras se fuma el último cigarrillo antes de comenzar su trabajo. Se mueve y agazapado se desliza junto a un oscuro y tenue pasillo que conduce a un montón de barriles, los utilizará para subir al entretecho, desde allí observará todo el panorama. Una vez arriba contempla todo a través de las distintas brechas, Leon Scott Kennedy se encuentra en un cuarto con una pequeña camilla… sobre ese cuarto hay un montón de cajas y fierros, parece que es un lío intentar meterse a ese entretecho, al parecer Kennedy descansa recostado sobre la camilla y ha dejado el maletín con la canica sobre una mesita. Más a la derecha logra distinguir un depósito de nafta semi-sellado al cual nadie hasta el momento le ha prestado demasiada atención. “Ahora todo es cosa de crear una distracción, veamos si es tan idiota como yo creo que es…”, se dice mientras le da una última quemada al cigarrillo en sus labios. Se prepara y finalmente arroja su cigarrillo encendido a la nafta, en cosa de segundos explota… pero no con la fuerza que él esperaba, sino a una escala más pequeña. De igual forma la distracción se produce y todos los soldados más aquel que está de su lado acuden a ver dicha explosión. Es el momento… Leon Scott Kennedy se ha puesto de pié y asustado sale del cuarto para ver que sucede olvidándose por completo del maletín… “es perfecto”, piensa, luego algo le da mala espina… “un momento, lo ha dejado solo… esto es demasiado fácil”, piensa mientras analiza la situación, mas en ese instante Kennedy regresa corriendo y coge el maletín fuertemente entre sus brazos esbozando una sonrisa nerviosa, luego vuelve a salir del cuarto…

“Bien, es un idiota”, piensa. “Lo abordaré cuando regrese”. Pasan unos minutos y todo vuelve a la calma, los soldados han aumentado el nivel de alerta y Kennedy finalmente regresa a esa habitación completamente solo cargando el maletín. Apenas ve que cruza el umbral de la puerta sale de su escondite y se deja caer silenciosamente en el pasillo… corre y sorprende a Kennedy por la espalda, le coge del cuello….


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… finalmente se mostró, me sorprendió entrando de regreso al cuarto y me cogió por el cuello, apenas rozó mi chaleco antibalas con su cuerpo una descarga de eléctrica de casi 100 voltios lo sacudió y lo arrojó contra una de las paredes semi- aturdido.

-Sorpresa…- le dije apuntándole con mi arma de servicio.- ahora si eres listo, pon tus manos sobre la cabeza y no te muevas.

Pero Old Snake no me hizo caso, solo me sonrió y me miró de forma desafiante a través de su rostro arrugado decorado por una que otra cicatriz.

-Oh, sí… ya recuerdo.- le dije otra vez.-Ahora es cuando el doble agente que trabaja para filantropía y que está infiltrado en nuestro equipo viene y me amenaza con su arma, ¿no?

Justo en ese instante a mis espaldas apareció Martins y los demás hombres, traían a Jonson maniatado y totalmente desarmado.

-¿Ves?, malas noticias, amigo… este ya no es tu juego…-le advertí mientras accionaba el interruptor que había en el muro simulando ser el de luz, pero en realidad dejaba caer los barrotes de titanio que convertían el espacio donde se encontraba Old Snake en una jaula. Quedó atrapado, mi trampa había funcionado a la perfección.

-Espero te acostumbres a esos barrotes, serán tus únicos amigos de ahora en adelante…- le dije mientras que con Martins y los demás muchachos nos felicitábamos, de hecho uno de ellos era un alto oficial del pentágono quien simulando ser un soldado raso había seguido la farsa y había confiado en mi trampa.

-Bien hecho, Leon… - me felicitó con un abrazo.- Fue difícil detectar a Jonson como el doble agente que nos vendía a filantropía, y tú, tú te cobraste tu revancha y atrapaste a este infeliz.

-El que ríe al último ríe mejor, señor.- le contesté.- Pero ahora viene lo más difícil… hacerle hablar, por la edad que debe tener, su rostro demacrado y duro… me parece que es de los tipos “no tengo nada que perder”, y esos son los peores.

-Ya cantará…- me dijo y ambos nos quedamos observando a Old Snake.- todos cantan…

Sin embargo Snake solo se limitó a sentarse en un rincón y a guardar silencio por el resto del día.

Cuando ya era de noche y esperábamos al resto del contingente militar de los Estados Unidos a que llegara, Snake se dirigió a mí desde el interior de su jaula.

-Kennedy… hey, Kennedy, ¿tienes un cigarrillo?

-No, no fumo… lo lamento.

-Dime algo… solo para quedarme tranquilo, lo de la canica… no era tal, ¿verdad?- me preguntó con voz grave y rasposa.


Yo sonreí y me dirigí al maletín, saqué la canica y la pateé con todas mis fuerzas contra uno de los muros partiéndola en dos.

-Así es, jamás ha existido una canica superpoderosa…, no te ofendas, todos alguna vez en la vida hemos sido tomados por tontos… Jonson se creyó completamente lo de la canica y no dudamos ni un instante en que te volveríamos a ver…

En ese instante Old Snake se puso de pié y se acercó a los barrotes.

-Elige… ¿amigo o enemigo?

-¿Cómo dices?

-Hay cosas que deberías saber sobre el tratado bio-armamentista entre Japón y EEUU, no quedarte con lo que ellos te venden…¿entiendes?, tienes que verlo de mi lado.

-Oye, parece que mi actuación de idiota te ha confundido…- le contesté.- ¿crees que caeré en tu trampa?

-Estás mal, niño… en el mundo ya no existen banderas… a mí ninguna me acoge y ninguna me protege…

-Lo sé, eres muy “popular” entre las autoridades…

-Pero tú pareces estar muy conforme sirviendo al presidente y a sus ministros… es tu chance de abrir los ojos… por eso quiero que elijas en este instante si eres mi amigo o mi enemigo…

















¿Amigo o enemigo?


Elige en la encuesta si Leon y Snake deben enfrentar esta historia trabajando en equipo como amigos... o si deben enfrentarse uno contra el otro, siendo enemigos.



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martes, 5 de julio de 2011

Patriotas



















CAPITULO 1



Sucedió una fría noche de Enero…

Me dirigí hacia la sala de monitoreo para chequear los signos vitales de aquella extraña maquinaria que encontramos a la deriva cerca de un desierto local, era una de las cosas más raras que habíamos visto y no entendíamos a cabalidad su naturaleza, y por ello me puse en contacto rápidamente con dos de mis contactos en el senado que sostenían vínculos con la armada de Norteamérica para que hicieran un viaje relámpago hacia la base gubernamental donde nos encontrábamos en el momento.

-Buenas noches, señores. Estupenda noche, ¿no es así?- entré saludando a la sala de monitoreo donde tres oficiales evaluaban el estado de esa… “cosa”.

-Un poco fría nada más.- me contestó uno.

-Oye, Kennedy, estamos apostando con los muchachos 20 a 1 a que es cosa es de origen extraterrestre.

-Ustedes sí que se divierten acá, ¿eh?- contesté sonriendo mientras me acerqué a la ventanilla polarizada para contemplar a ese engendro moverse a un compás repetitivo, como si respirara.

-Para mí no es de este planeta…- me dijo uno de ellos.

-Para que lo sepan, niños,… nuestro gobierno junto con el de Japón ya lleva años desarrollando tecnología bio-armamentista… - contesté mientras me fijaba en el ritmo cardiaco de esa cosa.- Lo más probable es que esto se trate del juguete perdido de uno de los dos países.

-… ¿y donde tiene el código de barras?- preguntó uno de ellos.

Le iba a contestar, pero el llamado de alerta que recibí en el intercomunicador me interrumpió.

-Kennedy, se trata de Stuart… lo hemos encontrado degollado en el ala norte.

-¿Quién habla?, identifíquese.

-Soy Martins, número de confirmación 2-0-0-8-2.

-Martins, ordene a sus hombres que no disparen a matar, quiero vivo al desgraciado.- le respondí.

-¿Qué sucede?- me preguntó uno de los muchachos.

-Alguien ha logrado entrar, activen protección blindada, quiero que se encierren aquí y no dejen entrar a nadie hasta que lo ordene, ¿entendido?

Abandoné la sala de monitoreo de la criatura y me dirigí luego al puente de vigilancia, a través de las cámaras de seguridad comprobé efectivamente a un reducido grupo de soldados rodeando el cadáver de Stuart. Salí afuera y acudí inmediatamente al lugar.

-¿Dónde está Martins?- pregunté al llegar junto a los hombres.

-Aquí estoy, Kennedy. Ya ordené a mis hombres para que hieran al sospechoso y no lo maten cuando lo encuentren.

-Bien, llevemos el cadáver de Stuart adentro y busquemos por todos lados.

Llevamos a Stuart al interior y luego comenzamos una incesante búsqueda por todos los rincones de la base, de haber sabido lo que vendría a continuación… aquella noche me hubiera quedado en casa.

Cuando llevábamos una media hora de búsqueda un ruido ensordecedor estalló en nuestros oídos y rápidamente una pesada maquinaria se ponía en marcha, lo primero que se me vino a la cabeza fue aquella criatura bélica que habíamos encontrado.

-¡Canal abierto!, ¡canal abierto!- grité por radio.-¡todos acudan a la sala de monitoreo ahora mismo!

Sin embargo al llegar una enorme cortina de humo nos impedía ver más allá de 10 centímetros, todo era confusión, caos y el sistema de ventilación de emergencia no se activó hasta un par de minutos después. Una vez que el humo desapareció por completo quedó en evidencia el enorme forado en la azotea donde teníamos custodiada a la criatura y la ausencia de la misma,… nos habían robado a la criatura en un abrir y cerrar de ojos.

Todo se aclaró cuando le pregunté a los muchachos que estaban en el interior de la sala de monitoreo sobre qué había pasado:

-Fue Stuart…- me dijeron.- entró a la sala con un rehén, ¡estaba vivo!, y al mirarnos, ¡nos sonrió!


Días después fui a dar cuentas de lo sucedido a mis superiores del FBI, fue una reunión bastante desagradable donde también se encontraban los dos senadores con vínculos en las fuerzas armadas y para colmo, se encontraban miembros del pentágono, un total de 8 personas me esperaban en una oficina de un edificio estatal en Washington.

-Uf, supongo que quieren mi cabeza…- dije mientras me sentaba.- en mi defensa diré que… jamás vi el código de barras en esa criatura…

-Leon, ahórrate tus chistes… esto es un poco más serio de lo que seguramente ya crees.- me dijo uno de mis superiores del FBI.

-Kennedy, ¿quiere saber como fue embaucado?...- me preguntó un oficial del pentágono.

-Muero de ganas de saberlo, señor.

-El espía infiltrado era ni más ni menos que Stuart, o mas bien el “cadáver degollado de Stuart”, su rostro no era más que una excelente máscara de látex de última generación al igual que la simulación de su herida, este espía había ingerido una droga que le detuvo los signos vitales por cerca de 30 minutos, 30 minutos necesarios para que nadie cuestionara su muerte y tal como seguramente él lo había planeado, lo llevaran al interior de la base.

-¿Y el verdadero Stuart donde se encontraba?- pregunté.

-Lo encontraron durmiendo como un bebé dopado en la parte posterior de un jeep. Ahora bien, este espía una vez que hubo recuperado la consciencia al interior logró reducir al único guardia que custodiaba su cuerpo, tengo entendido que usted ordenó a todo el personal para que buscara al sospechoso infiltrado por todos los rincones de la base despreocupándose del cadáver de Stuart…

-Hasta entonces creía que era solo un cadáver, si no estábamos en Raccoon City, ¿Cómo iba a saber que era un cadáver peligroso?

-Pues bien, ocupando a este guardia como rehén logró entrar a la sala de monitoreo donde activó una sofisticada señal GPS que cuadró como un mapa su ubicación en el interior de la base para que afuera un silencioso vehículo aéreo supiera exactamente donde se encontraba y que ya había llegado donde la bio-arma. Lo demás fue solo soltar un denso gas de distracción que le permitió tener el tiempo suficiente para que irrumpiera el avión estático y enganchara unos arneses a la criatura, el avión se elevó y el salió triunfante con el Big- X26 de la base.

-Sí, fue muy astuto…- reconocí en el instante.- es la segunda vez que me ven la cara…

-¿Quiere saber quien le vio la cara?- me preguntó uno de los senadores.

-Lo único que pido es que no sea un niño de 10 años, no lo podría soportar dos veces…

Los oficiales me enseñaron la fotografía de alguien a quien jamás había visto en mi vida.


















-Su alias es Old Snake, pertenece a filantropía… créeme si te digo que no es alguien común y corriente, literalmente

-Hasta ahora desconocemos sus intereses y motivos para haber planeado el robo del BIG-X26,pero debemos recuperarlo… y tú,Leon…. Tú debes enfrentarte a él…






…Boina verde, Cia, Fox Hound, flantropía… ¿Quién o qué diablos es este tipo?

LEON S. KENNEDY 00:22 A.M.



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sábado, 2 de julio de 2011

¡Feliz cajita infeliz!

Gracias! :)


Es lo único que puedo decirles a todos ustedes quienes se han hecho seguidores y leen constantemente el blog dándole vida :)

Han pasado ya poco más de dos años desde que este blog saliera al mundo por allá por finales del 2008 y que hasta estos días me tiene muy contento por la aceptación de todos ustedes. Hasta ahora no he celebrado aniversario alguno (cosa extraña) y es por ello que a modo de compensación les traigo a todos uds. un humilde obsequio n.n



















Esta imagen reune todo lo que a veces quisieramos nunca ver, Leon enfermo... esperando su muerte. Es por ello que se me ha ocurrido conocer vuestros propios puntos de vista sobre un Leon Zombie. La idea es que se animen a enviar un dibujo hecho por uds. en el que veamos a Leon ya convertido, putrefacto,.... infectado.... O_o

O seas, en el que se retrate el instante mismo de su muerte. Ese dibujo lo pueden enviar al ya viejo y conocido mail: amigosdeldiariodeleon@gmail.com

Ahora bien, todos quienes participen, solo por el hecho de enviar su dibu recibirán de regalo la "cajita infeliz" de Leon Scott u.u









Se trata ni más ni menos que de un archivo rar. que trae un pdf (que elegancia la de Francia xD) con:

-Las primeras 8 historias de este blog que comprenden del periodo 2008 a 2009 totalmente corregidas y con imágenes nuevas.

-La historia "Las plagas" donde Chris Redfield y Leon comparten cámara, peeeero en el PDF irá el final que ninguno más ha visto, el final que no salió elegido... estoy hablando del final alternativo: "villano".

-También irá de extra una historia que jamás publicaré en el blog por su contenido explícito en todo el sentido de la palabra, llamada: "quita tus sucios ojos de mi historia" en donde aparece ni más ni menos que Jill Valentine, es un cuento corto y exclusivo para el pdf.

-Y a todo esto se suman dos videos de corte fanvid que espero les gusten y sean de su agrado.



Bueno, amigos. Espero se animen y hay plazo hasta finales de este mes para que envien sus dibus, la idea es irlos subiendo todos acá en el blog y hacer una votación para el mejor. Y todos, absolutamente todos quienes envíen dibujo recibirán la cajita infeliz.


Saludos y gracias a todos :)