martes, 21 de diciembre de 2010

Milagro macabro














CAPITULO 3




-Mi nombre es Joe Rathbone… tengo 12 años de edad y los que me conocen suelen decir que tengo una personalidad introvertida y solitaria. Soy hijo de una prostituta drogadicta… me gustaría poder hablarte de mi padre… pero hasta donde yo sé, podría ser cualquiera… incluso tú.


-…Joe…¡Joe…!... ¡no me mates!... te lo suplico….¡ te puedo dar dinero!, ¡lo que tú quieras!


-No me importa el dinero…- contestó el muchacho mientras dibujaba distraídamente en el barro.- ya no me importa nada de nada…


-¡Bueno!... entonces, ¿porqué no me bajas de aquí, eh chico?...- preguntó el desesperado hombre quien colgaba de lo alto de una estructura metálica, se encontraba boca abajo y amarrado de sus pies.- La lluvia ya me está arruinando la ropa… por favor, bájame.


La lluvia se había dejado caer copiosamente sobre la ciudad y sobre todo allí en los suburbios, en donde el pequeño Joseph estaba a punto de cometer un nuevo asesinato, o al menos eso parecía. Parapetados tras unos automóviles abandonados nos encontrábamos Warren, Miller y yo acompañados de un contingente del equipo blindado de las fuerzas especiales. El lugar nos ofrecía una vista privilegiada de lo que sucedía con el niño y aquel hombre colgado de sus pies.


-Fue muy oportuno el haber llegado justo antes de la siguiente ejecución.- dijo Miller.-… lástima que no podamos salvar a aquel sujeto.


Por unanimidad se había decidido esperar a que el muchacho nos mostrara como era que asesinaba de forma tan bestial, para luego tomar todas las precauciones antes de detenerle. Supongo que no se trataba de la decisión más humana y considerada que se pudo haber tomado en el minuto, sin embargo ya nos habíamos formado una idea gracias a los antecedentes anteriores de que se trataba de alguna clase de fuerza incontrolable y poderosa.


-Maldito niño… ¿porqué tardará tanto en matar a ese infeliz?- dijo Miller fastidiado por la lluvia.- menudo resfrío que cogeré.


Yo continuaba observando todo a través de los binoculares y pude comprobar que el niño y aquel hombre intercambiaban palabras, de seguro el hombre le estaba suplicando o algo así. No me gustaba la idea de dejar morir a ese hombre solo para saber cómo el niño asesinaba a sus víctimas de forma tan sangrienta, es más, aquel hombre distaba mucho de parecer un criminal… pero eso no pasaba de ser un juicio personal y prematuro.


-Es posible que solo lo esté amedrentando…- nos dijo de pronto Warren analizando la situación.- y finalmente hoy no asesine a nadie.


-No me gusta esto de esperar a que lo mate para saber a que atenernos.- comenté.- puede que nos resulte fácil o difícil, pero que aquel hombre pierda la vida no va a cambiar mucho las cosas…


En ese momento el capitán de la fuerza blindada se acercó hacia nosotros.


-Detectives, para cuando lo dispongan mis hombres estarán listos para actuar.- nos dijo con cierto tono antojadizo.- La lluvia no cede y quizás debamos estar aquí toda la noche si es que de esperar se trata.


Warren se encargó de contestarle al capitán y a la vez tranquilizarlo. Yo mientras tanto me preguntaba sobre las cosas que se podían estar diciendo aquel niño y ese hombre..................


-¡Por favor!, ¡déjame ir!.... ¡me has confundido con alguien!...¡te lo suplico!


-No puedo dejarte ir aún…-contestó el muchacho.- eres mi carnada.


-¿Tu qué?... ¡¿que soy tu quee?!


-Mi carnada…-volvió a decir tranquilamente.- Allá a unos 250 metros de distancia hay un grupo de policías que esperan a ver cómo te mato y luego así sabrán que tan seguros están frente a mí. Pero no cuentan con que yo ya sé esto y simplemente me quedaré sentado sin hacer nada…, se sentirán impacientes, de seguro querrán salvarte… y comenzarán a acercarse rodeando este depósito de chatarra, aparecerán a mis espaldas y cuando estén lo suficientemente cerca… morirán todos.


-¿Eh?, ¡¿qué dices?!...¿hay unos policías ocultos allá lejos?


-Así es.-contestó el chico.- Podrías gritar auxilio con más fuerzas, a lo mejor así vienen pronto y acabamos luego con este trámite.


El hombre comenzó a gritar desesperadamente por ayuda ahora ya sabiendo que unos policías aguardaban a los lejos............


-Creo que es hora de actuar… es solo un niño y estamos armados, hasta cierto punto es casi ridícula esta situación.- dijo Miller ya al borde de la impaciencia.

Los tres nos miramos y acordamos en que no podíamos seguir arriesgando la vida de aquel pobre tipo, la propia situación se tornaba agónica. Nos dirigimos al grupo blindado que nos acompañaba para hablarles.


-Bueno, es hora de que actuemos.- comenzó a decir Warren.- Señores, el muchacho se llama Joseph Rathbone y tiene alrededor de 12 o 13 años de edad, es hijo de una madre enferma que suele drogarse constantemente. La mujer se encuentra desaparecida y no es descabellado pensar que el muchacho probablemente la haya asesinado. Les advierto que el chico es de alta peligrosidad y si algo malo ocurre tenemos órdenes de disparar a matar...


En aquel punto del monólogo no pude evitar mirar a Warren a los ojos, por un momento me pareció que exageraba,… pero al recordar los sangrientos hechos anteriores no podía culparle por eso. Comenzamos a caminar rodeando el depósito de chatarra, la idea era sorprender al chico por sus espaldas..............


El muchacho súbitamente se puso de pié y dirigió su mirada hacia los automóviles abandonados que descansaban a la distancia, una sonrisa iluminó su rostro.


-¿Eh?, ¿qué ocurre?, ¿porqué diablos sonríes?....- le preguntó el hombre colgado boca abajo


-Ya vienen por mí….- le contestó el chico. Luego pareció dirigir sus palabras al aire.-... no podíamos esperar menos de ellos, ¿no es así amigo mío?


La fantasmal figura alada que acompañaba al muchacho a todos lados asintió de una manera grotesca y sanguinaria.


















***



De pronto tuve una sospecha... una leve sospecha de algo...

LEON S. KENNEDY, 02:12 A.M.


Creative Commons License
El diario de Leon S. Kennedy by Marcelo Carter is licensed under a Creative Commons Reconocimiento-No comercial-Sin obras derivadas 3.0 Unported License.

5 comentarios:

carlos dijo...

Uhh q genial esta parte marcelo no tengo descricion d lo genial q es palabra eres sorprendente muy buena imagen d ese demonio alado ya espero el capitulo 4 lo q sea necesario te abmiro marcelo saludos ;D

Brian dijo...

Fua Marce sin palabras lo tuyo genio excelente las historias son cada ves una mejor que la otra espero la parte 4 seguro va a ser excelente como las anteriores saludos Marce

carlos dijo...

Con tu talento marcelo si trabajaras en el mundo de los videojuegos serias un gran exito hicieras de cualquier personaje terceario o secundario una gran estrella famosa primaria de cualquier videojuego y genero eres genial ;-)

Marcelo Carter dijo...

Muchas gracias, Carlos y a ti también amigo Brian. me pone muy contento que les haya gustado esta historia y pues, ya está listo el capitulo final. Un saludo a ambos y de veras que agradezco mucho sus palabras.

Un saludo n.n

Anónimo dijo...

bueno marcelo quieres que la capcom vea esto registrate en capcom.com
y no greo que ala capcom le guste ver una mezcla de la silent hill y la resident evil por que son adversarios